Por José Nova

Los merengueros se han puesto las pilas y parece ser que el ritmo nacional quiere salir de ese letargo que le restó posicionamiento en la radio desde aquel inolvidable “Perro ajeno” (2007) en la voz inconfundible de nuestro Rubby Pérez.”

Piezas como “De qué te ríes”, de Rubby; “Plan B”, de Peña Suazo; “Te voy a querer toda la vida”, de Eddy Herrera”; “Llegó la morena”, de Héctor Acosta; “Suelta to”, de Los Hermanos Rosario; Miriam Cruz con “Pobre de ella”, y Fernando Villalona con “Lo ajeno se respeta”, entre otros, están inyectando buenos latidos al merengue.

Es cierto que de la “payola” hay que reírse para no sufrir, porque a muchos artistas se les hace cuesta arriba darle el frente a los altos costos que conlleva la promoción en la radio, donde para pautar un tema tienen que invertir entre RD$180,000  a RD$200,000, solo en la Capital, ya que en Santiago hay que desembolsar entre 200 mil a 250,000, según afirman los propios cantantes y mánagers. A la nómina se le suman las asociaciones de Dj, que en los últimos tiempos se han multiplicado. Los exponentes de cualquier género sostienen que tienen que cantearse cada dos meses con 30 mil o 40,000 pesos a cada una. 

No deja de preocupar, pero lo cierto es que el efecto de la “payola” no es exclusivo contra merengueros. Urbanos, salseros y bachateros viven esta misma situación, y aún así logran éxito, mientras muchos merengueros no paran de lamentarse. “La reina del merengue”, Milly Quezada hace poco dio en el clavo: “los artistas tienen que reinventarse”. 


Lo primero es que muchos cantantes dejaron de verse como una empresa. Hoy ellos mismos elaboran sus comunicados, los envían a los medios, distribuyen sus discos promocionales, y olvidan que el artista solo debe ser artista. Tampoco han asimilado los nuevos modelos de mercadeo y publicidad y se han ahogado en la orilla de la vorágine del internet y las redes sociales sin disfrutar de sus bondades.

Aun así, hay señales halagadoras dentro del merengue, porque no se debe restar méritos a figuras como Miriam Cruz, quien ha asimilado los códigos actuales y se ha reinventado. No deja de acumular éxitos para mantenerse a la cabeza en su género. 

Fuente: http://www.elcaribe.com.do/